viernes, 20 de junio de 2014

20 ideas para mejorar tus escaparates

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Nadie duda de la importancia que tienen los escaparates en las tiendas y las diferencias que marcan cuando se hacen bien. Se suele decir que el escaparate es la tarjeta de presentación de una tienda, y es cierto, pero la importancia del escaparate va mucho más allá. Además de ofrecer información al posible comprador (productos, marcas, precio, estilo…) se puede considerar el escaparate como un reclamo publicitario. Como todos los elementos publicitarios, tiene sus particularidades. Hay estudios que dicen que el tiempo máximo del que dispone un escaparate para llamar la atención de un peatón es de unos siete segundos, por lo que no hay mucho margen de error. Es por ello que he decidido recopilar una serie de recomendaciones para ayudarte a mejorar el rendimiento de tus escaparates.

Busca la coherencia

El escaparate debe quedar integrado con el diseño, la filosofía y la orientación de la tienda: fachada, rótulos, iluminación, puerta, mobiliario, selección de producto, cartelería, etc. Las incoherencias confunden a los clientes y provocan rechazo, así que cuidado con copiar otros estilos o tendencias.

 Iluminación fuera de la vista

Los focos y todo tipo de iluminación deben quedar ocultos a la vista o deslumbrarán al cliente que, incómodo, dejará de mirar. Si no es posible que queden ocultos en el techo, podemos usar adhesivos (vinilos) en acabado mate, a modo de parasoles a partir de cierta altura.

 Atento a las distancias

Antes de diseñar la cartelería y la rotulación, tanto de lemas como de precios, hay que tener en cuenta que la distancia máxima a la que una persona puede leer la letra pequeña de un texto es de entre 18 y 35 cm. La distancia mínima se puede acortar en según los contrastes entre el color del fondo y la letra, el tipo de letra, etc.

 ¿Escaparate abierto o cerrado?

Ni escaparate abierto ni cerrado. Si el escaparate es abierto, la gente se verá atraída al ver a otros clientes dentro de la tienda  y desconfiará cuando vea poca gente. Si el escaparate es cerrado, es mucho más fácil conseguir la atención del cliente, pero perderemos la conexión visual con el interior. Lo ideal es una combinación que nos permita las dos opciones.

Menos es más

El exceso de producto impide que el cliente pueda fijar la atención en uno. La exposición del escaparate deberá ser una selección de lo más representativo que encontraremos en el interior, lo más nuevo, o una selección “temática”, que destaque una marca, una línea de productos, etc. Por otro lado, hay que saber que el espacio del que dispone un producto es un indicador de su importancia y precio, por lo tanto esta información debería transmitirse de manera correcta, porque un comprador que se vea atraído por un producto que crea que piense que es asequible por la manera en la que está expuesto y que compruebe que no lo es, se puede sentir engañado. En el caso contrario, estaremos perdiendo oportunidades de atraer al cliente correcto.

 Transmite un mensaje, cuenta una historia

El escaparate debe transmitir un mensaje. Todo elemento que pueda distorsionar este mensaje debe ser descartado, por tanto hay que cuidar que los elementos decorativos y los de apoyo (displays, cartelería) sirvan para reforzar el mensaje. En caso de duda, es mejor retirarlos.

 Selecciona bien lo que muestras

El escaparate no es una extensión de la tienda, es más una tarjeta de presentación que tiene que comunicar a tu cliente si el tipo de producto que él busca lo encontrará dentro de la tienda. Para ello, debes transmitir claramente, como mínimo, las marcas, productos y el escalonado de precios que ofreces. Esto no quiere decir que tengas todo en el escaparate.

 Orden y agrupación son imprescindibles

Los productos se deben agrupar por línea de producto, marca, familia, modelo y color, para facilitar que el cliente pueda, de manera clara y rápida, llegar a la conclusión de que lo que busca está dentro de tu tienda.

 Limpieza absoluta

La limpieza del escaparate es especialmente importante por lo que tiene éste de tarjeta de presentación. Un escaparate sucio sugerirá una tienda sucia y descuidada. Esto afecta al interior del escaparate y, por supuesto, a los cristales. La higiene en el comercio no es una opción.

 Que el producto respire

El cliente debe poder ver y “focalizar” con facilidad. En pocos segundos debería poder llegar a la conclusión de los productos y marcas que ofreces. Después, debería poder desplazar su vista rápidamente entre las distintas composiciones, expositores, etc. Para que esto sea posible, debe haber espacios “para respirar” entre las composiciones o expositores de distintas marcas o entre los grupos de productos dentro de una misma marca.

Indica los precios

Es fundamental que indiques los precios porque, si no es así, el cliente pensará que la razón de ello es “porque son caros”. Según el tipo y la cantidad de productos expuestos, convendrá que indiques los precios de todo o de una cantidad representativa.

Cada producto a su altura

La altura de los ojos es la que mejor se ve y la más efectiva. Coloca ahí los artículos más importantes y los más pequeños. La siguiente mejor altura es la altura de las manos. Utilízala para exponer artículos que den sensación de accesibilidad, los que se cogen con la mano. La altura de los pies es de poco impacto, se utiliza para objetos de gran tamaño, para ambientar o no se utiliza. La altura por encima de la vista es la menos efectiva, no es recomendable que la utilices, salvo para artículos muy específicos.

 Renuévalo con frecuencia

Deberías renovar el escaparate cada dos o tres semanas. A partir de ese plazo pierde su efectividad. Has de tener en cuenta que hay mucha gente que pasa por delante del escaparate varias veces al día y deja de llamarle la atención. También tienes que tratar de presentar las cosas de manera diferente o cambiarlas de sitio para intentar sorprender y transmitir la idea de actividad.

 Imprime tu marca

El nombre de tu tienda también es una marca. En el escaparate, dentro del campo visual, debes situar el logotipo o nombre de tu tienda. El rótulo es para que te localicen desde lejos.

 Ofrece información

Siempre que puedas, utiliza el escaparate para dar información. Puede ser para destacar un producto frente a otro, para transmitir las ventajas que encontrará el cliente al usar el producto o información general, cuando se trate de productos nuevos.

 Destaca lo importante

Si quieres destacar a un producto o marca sobre otros, hazlo de manera inequívoca: concédele el mejor espacio, ilumínalo mejor, colócalo más alto que el resto o incluye su embalaje (si este es atractivo).

 Aprovecha las tendencias y las modas

En ocasiones, un producto tiene relevancia especial en un momento concreto: acaba de ser lanzado, está siendo publicitado, lo usa alguien famoso… No puedes desaprovechar la oportunidad y debes destacarlo, presentándolo, además, junto con algún elemento que recuerde el motivo de su relevancia: imagen del anuncio en prensa, etc.

 Haz cambios inequívocos

Cada vez que cambias de escaparate o de campaña, deberías adecuar el color de las paredes, fondo y suelo del escaparate por lo que es mejor que utilices materiales económicos para no caer en la tentación de alargar su uso. El tipo de material a usar dependerá del tipo de producto a exponer, pero puedes utilizar pintura, papel pintado o telas.

 Utiliza fotografías

Las fotografías son de gran ayuda para sugerir el uso o las ventajas de un producto. A veces te serán proporcionadas por las propias marcas pero, si no es así, con poco coste puedes utilizar tus propias imágenes.

 Vigila a los “ladrones de atención”

Tienes que tener mucho cuidado con los “ladrones de atención”, principalmente espejos y pantallas de tv o de ordenador. Las pantallas tienen la propiedad de monopolizar la atención, por combinar imágenes y movimiento dentro de un entorno donde hay “cosas” que están quietas. En el caso de los espejos, duplican el producto (y esto es especialmente grave cuando hay demasiado), dificultan la concentración en el escaparate, al reflejar lo que pasa detrás del cliente y acortan el tiempo de visión del escaparate ya que, a los pocos segundos, el cliente terminará mirándose a sí mismo para comprobar si tiene buena cara, si se ha despeinado, etc.



Dirección:
http://celestinomartinez.com/2011/03/12/20-ideas-para-mejorar-tus-escaparates/

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